Cómo proteger a tu empresa de posibles conflictos laborales

Nos encontramos en un momento en el que cualquier contratación, decisión o acción llevada a cabo sin el correcto asesoramiento puede llevar en el futuro, a un posible reclamo laboral no deseado

Actualmente, el costo de los reclamos laborales puede ser muy elevado y enfrentarse a un juicio puede ser para el empleador, en algunas ocasiones, devastador, poniendo en grave peligro la continuidad de su empresa o emprendimiento

La correcta implementación de las leyes laborales puede prevenir futuros conflictos y reducir en forma significativa, las posibilidades de ser objeto de un reclamo laboral futuro.

Para ello, es necesario aplicar las herramientas adecuadas y contar con asistencia permanente, desde el inicio de la relación laboral para que el transcurso de la misma sea satisfactorio para ambas partes y no desencadene en un indeseado reclamo por el que ningún empleador quiere atravesar.

La correcta asistencia profesional en el transcurso de cualquier relación laboral, es clave para lograr que la misma sea beneficiosa, tanto para el empleador como para el trabajador.

Para ello, es esencial contar con un asesoramiento sólido, ejerciendo un análisis previo de la situación particular, antes de la toma de cualquier decisión.

Es fundamental que el área legal y contable de tu empresa, trabajen en forma unificada a fin de evitar discordancias en la implementación de normas o estrategias.

La falta de comunicación entre estas áreas elementales de la empresa,  podría desencadenar en el futuro en una contingencia no deseada, que en la mayoría de las ocasiones, genera pérdida de sumas de dinero para los empleadores.

Éstas áreas al trabajar en conjunto para una misma empresa, protegen sus intereses, anticipan los posibles riesgos y reducen al mínimo las posibilidades de una dispuesta, ya que el contrato de trabajo de cualquier empleado en particular, se encuentra supervisado desde el inicio por profesionales capacitados a tal efecto, colaborando en la adaptación de los procesos internos de la empresa a la legislación vigente, minimizando cualquier riesgo.